miércoles, 6 de abril de 2011

UN DÍA DIFÍCIL

Con este amargor tan extraño en la boca, tratando de no vomitar el veneno que me embarga, me desplazo calladamente hacia la alcoba donde duerme Carlos, ajeno a las desventuras laborales de mi día.
Miro su rostro distendido, la barba que le puebla alguna arruga prematura pero que yo adoro; su perfume, mezcla de lima y hombre. Lo miro todo, lo siento todo. Mientras lo contemplo, la dulzura se apodera de mi boca, y metiéndome bajo las sábanas, dejo que se desparrame sobre nuestro lecho.

48 comentarios:

Charly T. dijo...

Una ternura de micro. Leyendo este, no puedo menos que comparar la dureza del anterior, lo que hace que me maraville ante la versatilidad que te caracteriza al escribir. El tuyo es arte (por más que te lo diga cada dos por tres).

Besos.

Mª Carmen dijo...

Una entrada estupenda amiga, no hay nada mejor despues de un día negro que acabarlo disfrutando de esa manera.Me gustó.Besitos.

MAJECARMU dijo...

He ahí una prueba de cómo podemos transformar un sentimiento:
El amargor de la lucha y el cansancio...se vuelve dulzura relajada al contemplar al ser amado.
Muy bueno y didáctico,amiga.Todos podemos transformar los sentimientos y elegir lo mejor.Cuando no esté cerca la persona amada,sólo es cuestión de estar alerta y tener la imaginación disponible.
Mi felicitación y mi abrazo inmenso,amiga.
M.Jesús

Mary dijo...

Ayyyyyyyyyyyyyy¡!Lili tienes la magia de trasformar un dia amargo y estupido en una noche dulce y apasionada....como me gusta.

Un besazo AMIGA¡!

Mar dijo...

Hey!... Pues no terminó mal el día difícil, eh?... ;)

Besazos. Miles.

Bárbara Himmel dijo...

...ahora dime la verdad lili,esto es puro cuento!!! jajaja,
qué suerte abstraerse de todo y simplemente amar!!!
breve con buen mensaje..
abrazo!!!

Liliana G. dijo...

Me lo podés decir cada dos por cien, Charly, no me ofendo :)

Querido amigo, el escritor vocacional tiene que poder escribir sobre "casi" todos los temas dentro del mismo género. Caso contrario, además de monótono, sería aburrido, sin contar con que el no hacerlo se puede interpretar como una limitación personal. Si hay limitaciones, que sean otras más difíciles de remediar.

Muchas gracias, Charly.

Besos.

Liliana G. dijo...

No podemos dejar que un día negro fuera de casa se convierta en un día negro permanente ¿verdad? :)

Mil gracias, M. Carmen.

Un besote.

Liliana G. dijo...

Estoy completamente de acuerdo, todo lo podemos transformar, y en la voluntad de transformación está nuestro propio bienestar y el de quienes nos rodea.
La imaginación es un arma maravillosa a la hora de "desenchufarnos" de los problemas que nos acarrea el día.

Muchas gracias, María Jesús, siempre es un placer "escucharte".

Un abrazo inmenso.

Liliana G. dijo...

¿Qué haríamos sin la magia, verdad Marita? Yo, no tengo idea, la magia la llevo puesta...
Me encantó eso de transformar un día amargo y estúpido, jajajaja

Sos la reina de los comentarios, no hay nada que hacerle :)

¡GRACIAS!

Besotes.

Liliana G. dijo...

A ese precio está bueno que todos los días sean difíciles ¿a que sí, Mar? :)

Muchas gracias, amorosa.

Besos y cariños.

Liliana G. dijo...

Bueno, por lo menos bien vale el esfuerzo de intentarlo, jajajaja
Después de todo, a la hora de amar, todo lo demás queda relegado a segundo plano ¿o no?

Gracias, Bali.

Besazos.

PATSY dijo...

Qué manera estupenda de describir una escena con sus avatares cotidianos, tan realeas y a los que se les puede arrancar una deliciosa moraleja.
Me encantó.

Besos, Lili.

Flor dijo...

Hola Liliana!

Tenemos amigos comunes y hoy entré en tu blogue y me gustó muchisimo de todo lo que vi y leí.
Me encanta como escribes.
No sé si al entrar en la cama, él se despertó pero solo sentir el calor de alguién que amamos y que nos ama, hace con que el amargor se convierta en dulzura y ese si es un fenomeno que hace con que la vida
no la sintamos tan dura y nos dé animo para el día siguiente.

Te invito a mis "residencias"jaja.

Un beso
Flor

Aniquiladora dijo...

Un gesto muy tierno. A veces no es necesario ir más allá del simple contacto o roce, y sentir la fragancia de ese cuerpo que tanto deseamos.

Besosss.

El alegre "opinador" dijo...

Menos mal que cuando llega la noche nos espera una persona amada entre las sábanas.
Besos.

esteban lob dijo...

Hola Liliana:

Bastante peor sería un excelente día laboral...y la cama vacía en el retorno.

Cariños.

Juan Sin Nombre dijo...

Dejar los problemas en la puerta, es una de las mejores pautas de convivencia, y si se le agrega dulzura y amor, está todo dicho.
Como siempre, tu mensaje llega en poquísimas y certeras palabras.

Un beso Liliana.

Liliana G. dijo...

Escribir un cuento supone hacerlo desde la observación de lo cotidiano, el mensaje siempre está aunque no nos demos cuenta :)

Gracias, Patri. Buen fin de semana.

Besotes.

Liliana G. dijo...

¡Bienvenida, Flor! Es un gusto encontrarte aquí, por supuesto que la puerta queda abierta para que vengas cuando quieras :)

Saber que contamos con alguien cerca ya nos cambia el ánimo y el humor, es verdad...

Gracias, Flor.

Un beso.

Liliana G. dijo...

Tan cierto como real, Aniki, a veces con sólo "estar" ya hace la diferencia.

Mil gracias.

Un beso grande.

Liliana G. dijo...

Menos mal, y cuando no nos espera nadie, la esperanza obra milagros...

Muchas gracias, Opi, es un gusto encontrarte nuevamente por aquí :)

Besos.

Liliana G. dijo...

Es cierto, Esteban, aunque cuando la cama está vacía, el corazón se llena con las ilusiones ¿no es así?

Gracias, querido amigo.

Un cariño enorme.

Liliana G. dijo...

Tan difícil como real,los problemas en la puerta, muchas veces pugnan por entrar por asalto, allí es cuando nos debemos armar de dulzura y amor, es lo único que los combate.

Gracias, Juan.

Besos y abrazos.

apm dijo...

Muy bonino y reflexivo Lili... muy bueno: después de un mal día, de esos horribilis que de cuando en cuando nos atrapan como si nos succionaran en una espiral de negrura, es hermosísimo ir leyendo cómo esta mujer, va dejando el veneno y tornandolo en dulzura al ver al hombre que ama plácidamente dormido, y sin veneno ya, sin amargtor, llena de dulzura y con ternura infinita, meterse en la cama, venciendo así al día.
Me ha encantao, es una chulada

Mil besitos gordotes

Linus dijo...

No hay nada como terminar el día transformando las amarguras laborales olvidándose de ellas para prestarle atención a lo verdaderamente trascendente.
Sólo tú puedes darle sentido, ternura y mensaje a un brevísimo texto como este.

Besos.

Jose Manuel Iglesias Riveiro dijo...

La vida laboral es dura, cada día mas competitiva, pero al final supiste y pudiste arreglar lo que había empezado mal, y es que no hay nada mejor que refugiarse en brazos del amor para arreglar y poner las cosas en su sitio, que no es otro que el ser feliz.
Un beso.

Anónimo dijo...

Es el mejor modo de aliviar un día difícil.

Un verdadero placer Liliana

Liliana G. dijo...

Es que no podemos contagiar nuestro mal humor a quien no tiene nada que ver con él ¿verdad? Además de injusto sería perderse de un momento mágico...

Mil gracias, apm :)

Besos y cariños.

Liliana G. dijo...

Y no nos damos cuenta de la trascendencia de esos momentos hasta que por desgracia los perdemos, por eso la importancia de disfrutarlos cuando aún estamos a tiempo...

Muchas gracias, Linus.

Besos.

Liliana G. dijo...

Es verdad, la vida laboral cada día nos sumerge más en su cenagal de tiempo, de tensiones y de disgustos. Pero si no pudiéramos revertir esta situación al llegar a casa, la convivencia se haría imposible...

Gracias, José Manuel.

Un fuerte abrazo.

Liliana G. dijo...

El placer de encontrarte en Cuentos... es mío, Mistral.

Muchísimas gracias.

Un besote.

guillermo elt dijo...

No te había descubierto este precioso rincón.

Un maravilloso relato que ya lo quisiera yo "pa" mí... Pero no en letras... jeje.

;)

Besibrazos.

Liliana G. dijo...

Ya somos dos, Guille ;)

Bienvenido a este rincón ¡que suene la música celta!

Besibrazos. Chuic

Unknown dijo...

No hay nada más placentero que llegar a casa y que con una mirada a la persona que quieres te sientas reconfortada,
un beso
Marian

Recomenzar dijo...

Sutil bello sensual
abrazos

//elojodelhuracan// dijo...

Hay veces que tus cuentos son arrolladores, plenos de garra o de misterio. Otras, en que la ternura que generan invaden cada rincón del corazón que te lee, esta es una de ellas. Sí, se te lee con el corazón.

Un beso generoso en amistad y cariño, Li.

Liliana G. dijo...

Claro que sí, Marian, la casa siempre debe ser el refugio de los sinsabores que se cuecen fuera de ella.

Muchas gracias, y otro beso para vos :)

Liliana G. dijo...

Hola, Recomenzar, bienvenida y muchas gracias por tu comentario.

Un fuerte abrazo.

Liliana G. dijo...

Mil gracias, querido Jorge, por la calidez infinita de tu comentario. Estas son las cosas que se constituyen en el empuje de quien escribe.

Un besote inmenso.

Marymar dijo...

Bello en su simpleza, tierno en su contenido. ¡Qué bonito!

Besos Lilita, me encantan tus cuentos.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, mi apreciada Lili:
Bueno, creo que, a veces, es más que justo amar y dejarse amar... simplemente me encantó.
Abrazos y besos, Lili querida.

Liliana G. dijo...

Mil gracias por tu cariño y por tu apoyo, Marymar :)

Un besote.

Liliana G. dijo...

Así es, querido Rodolfo, la vida es más que luchas y penas, también es amor y amistad.

Muchas gracias por estar siempre tan cerca, es hermoso sentir tu presencia.

Besos y cariños.

Marcos dijo...

Bello, romántico e intimista. Un relato para leer cuando uno llega de trabajar ;)

Cariñosos besos, Li.

Liliana G. dijo...

Bueno, leyendo también se va la furia de un mal día de trabajo, es cierto...

Muchas gracias, Marcos.

Otro beso para vos.

Daro dijo...

Si, como que los días no terminan siendo tan difíciles si uno llega a su cama y se encuentra con su ser amado. Al menos es lo que a mi me pasa!
Muy bonito Lili! Besos

Liliana G. dijo...

Algo bueno tiene que tener un día difícil ¿no? :)

Muchas gracias, Daro.

Besotes.