martes, 24 de enero de 2012

METAMORFOSIS

No sé por qué me torturo pensando en el mañana, por qué desato los nudos de mi vida intentando que el destino no me esquive como tantas veces lo ha hecho y yo sucumba como un insecto en la telaraña de mis miedos.
Nací para ser mariposa, lo sé, lo palpito. Pero hoy, que sólo soy la impronta de una oruga, me arrastro en la incertidumbre por la ausencia de mis alas. Y en la longitud del futuro donde se agazapan los sentimientos vagos que alberga mi alma herida, dejo grabada para siempre la magia que me precede en el singular infinito de mi yo apasionado.
¿Será acaso que el presente me ahoga con su imperfección de desencantos, escondiendo en el ocaso los colores de esa mariposa nonata? ¿O será que en mi ignorancia he matado otros capullos, creyendo que los ayudaba a despojarse de su lastre de penas encontradas? ¿Seré yo el asesino encubierto, sempiterno y hostil que amaga con destruir los caminos que aún no han sido hollados por los pasos del tiempo?
¡Qué ignorancia la mía! Creer que puedo detener las manecillas circundantes de mi reloj imaginario, cuando apenas puedo erigirme en la mínima lumbre de la vida, y así, perdida en los laberintos estériles de voraces tic tac, muero impune de impulsos vanos. Ahora sé, que desde vientre estéril de mi ignorancia no pariré orugas ni mariposas, pero sí el sortilegio del mañana.


69 comentarios:

Antonio Misas dijo...

¡Qué bonito! qué ritmo de oleaje lento. Cuán de aquel hemisferio, de aquel plano, de aquel lado, qué Argentino el pensamiento... y yo sé que tú naciste para ser mariposa... y sé que no asesinaste nada... qué ignorancia la nuestra querida Liliana...

Muchos abrazos y besos

Charly T. dijo...

Soberbio, no se pueden decir tantas cosas profundas en un texto donde la lírica es un sortilegio en sí misma.
Sé para qué naciste y sé quién sos: un encanto de mujer.

Besos.

tecla dijo...

Me uno a ti, Liliana en el desasosiego de mi ignorancia.
Sé que sé muy poco, pero que también sé mucho.
¿No es para estar inquietas?
Disfrutemos en paz la luz de los amaneceres y luego después, que sea lo que Dios quiera, o quien quiera que sea dios.
Yo- qué- sé.
Si no sé nada o sé bastante.

Te abrazo mucho.

Cinarizina dijo...

Hola Liliana...excelente prosa, llena de interrogantes que denotan la angustia de la incertidumbre...mas el final, es muy esperanzador, como debe ser. Oruga y mariposa, tienen una misión, las dos son importantes.
Recibe un fuerte abrazo.

Lapislazuli dijo...

Preciosa prosa, un fina con esperanza, no te encierres en la oruga- Un abrazo

MariCarmenblogs.com dijo...

Bella metafora, la création, el sincero deseo de ayudar.
A veces por querer hacer mas, séria mejor hacer menos, pero ese conocimiento solo la vida lo da, mientras tanto seremos orugas, aspirando a ser mariposas.

Mi abrazo y mi admiracion.

Sarco Lange dijo...

Qué bonito, abrí tu blog y una mariposa salió de volando por la pantalla.

Bss.

Liliana G. dijo...

Sí, Antonio, qué ignorancia la nuestra. Admitirla nos hace mejores, erradicarla nos haría libres... quizás una utopía, quizás un camino escabroso por el que debemos transitar para encontrar la sabiduría sin siquiera saber si algún día la encontraremos. Por lo menos hay que intentarlo.

Adoro tu empatía con mis textos ¡Gracias, Antonio!

Otros muchos besos y abrazos.

Liliana G. dijo...

Carlos, sé que me conocés, hemos compartido inumerables tertulias literarias, hemos hablado una y otras vez debatiendo nuestros respectivos textos. Nos sabemos con alegrías y mucho más con preocupaciones, yo también sé lo que vale tu comentario y por eso lo valoro tanto.

¡Gracias!

Besotes.

Liliana G. dijo...

Sí, Tecla, inquietan la incertidumbre de la ignorancia y la misma incertidumbre de la sabiduría. Si no fuera así, la vida no sería vida.
Estoy totalmente de acuerdo en que no hay que perder tiempo ante tanta pregunta retórica, es mejor concedérselo a las bondades de vivir, pero a veces hay circunstancias en que nos obligan a replantearnos ciertas actitudes, lo que no quiere decir que nos perpetuemos en ellas.

Tranquila, Tecla, yo tampoco sé :)

Mil gracias y otros muchos abrazos.

Liliana G. dijo...

Es verdad, Cina, la incertidumbre siempre provoca angustia, porque cuando no sabemos algo, nos sentimos indefensos antes la vida.
Siempre habrá esperanzas en mis finales, querida amiga, no la perderé nunca.

Muchas gracias, amiga.

Un cariño muy grande.

Liliana G. dijo...

Claro que no, Lapislázuli, las transiciones (o metamorfosis) siempre son necesarias, continuar siendo oruga por siempre no es una opción para vivir.

¡Gracias!

Besos.

Liliana G. dijo...

MariCarmen querida, nunca podrías haber sido más clara, más realista y más sabia en una frase como la que me estás ofreciendo:

"A veces por querer hacer más, sería mejor hacer menos..."

Creo que justamente allí reside uno de nuestros grandes errores, también el mío.

¡Gracias, de todo corazón!

Un beso inmenso.

Liliana G. dijo...

Muchas gracias, Sarco, te la regalo con todo cariño :)

Besos.

Jesús dijo...

Muy buenas tus reflexiones, sin dudas volveré a repetir para seguirte leyendo. Un saludo y sigue así, con tan buen trabajo narrativo.

Marymar dijo...

Una prosa poética bellísima, de un lirismo y una profundidad que llaman a la reflexión. Gracias por compartir esta joya con nosotros.

Besos.

Mary dijo...

Demasiadas preguntas, no busquemos tantas respuestas creo que no vale la pena, lo importante es vivir el momento, sin pensar en el mañana, hoy estamos aquí mañana quilosa¡¡¡¡, da igual oruga que mariposa, todos tenemos nuestro propio encanto difícil de imitar.

TE QUIERO REINA DE LAS LETRAS¡¡¡

//elojodelhuracan// dijo...

No sólo naciste para ser mariposa, sino que lo sos, una de las más bellas que tuve el placer de conocer, y lo único que conozco (y doy fe) que pudiste matar una y otra vez, es a la injusticia.
Sos grandiosa Liliana. Te quiero mucho.

Isabel Martínez Barquero dijo...

Hondo y reflexivo, pero acunado en una prosa poética que le pone alas y vuela como una mariposa de seda auditiva, Liliana.
Está claro que somos seres en continua metamorfosis, aunque no se vea desde el exterior.
Un abrazo.

Liliana G. dijo...

Muchas gracias, Jesús, trataré de no defraudar tus expectativas.

Un abrazo.

Liliana G. dijo...

Si no la compartiera, Marymar, de nada me hubiera servido haberla escrito, son los ojos lectores los que le dan el valor que le corresponde...

¡Gracias!

Besotes.

Liliana G. dijo...

Son sólo momentos, Mary, esos en que uno se pregunta mil cosas y luego las olvida mientras se dedica a vivir :)
Es cierto, el tiempo que nos ocupan las preguntas se pueden utilizar para compartir vida.

¡Muchas gracias, amorosa!

Besos y cariños. TKM

Liliana G. dijo...

Qué bonito piropo, Jorge, sos el mismo cariño de siempre :)

¡Gracias!

Un beso enorme.

Liliana G. dijo...

Es verdad, Isabel, nuestra metamorfosis interior no está a la vista de todos sino a la de aquellos que pueden ver a través de nuestros sentimientos...

¡Muchas gracias por tu calidez!

Otro gran abrazo.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Mis saludos, apreciada Liliana:
¡Qué bello y bien construido microrelato! Encantador, impactante, soberbio, son sólo algunas palabras que podrían tratar de definirlo. Así como el diamante, antes de luz resplandeciente, fue carbón, también la mariposa fue primero una insignificante oruga antes de ser una obra de arte viviente. Me pareció ver volar miles y miles de bellas mariposas, en mi luminoso entorno, en tanto que te leía, querida hermana Lili.
Besos y abrazos muuuy tiernos y muy saludables días.

Rosa dijo...

Bonito relato, lleno de preguntas inciertas.
Ojalá todos fuesemos mariposas y no orugas arrastrándose por la vida.
Besitos Liliana.

PATSY dijo...

Perdí la cuenta de la cantidad de veces que leí este cuento, y sin embargo, sigo pegada a ese lirismo tan tuyo que lleva a la reflexión y que además es un deleite para el alma.

Un beso, genia.

Marcos dijo...

Un texto donde la trascendencia fundamental de la vida hace un alto para buscar respuestas, que a pesar de ser retóricas, adornan los renglones que escribiste. Me da gusto leerte, te lo aseguro.
Muy bueno!!!

Besos

Anónimo dijo...

que precioso Liliana.
que hermosa manera de hacer,
con las dudas del hoy,
la cuna del mañana.

un saludo.

Liliana G. dijo...

Querido Rodolfo, tus expresiones tan halagüeñas y cariñosas me conmueven. Te doy infinitas gracias por ello, ya que me me alientan a seguir perseverando en este camino de las letras.

Un beso enorme y un abrazo de oso :)

Liliana G. dijo...

Como decimos por mi tierra "por algo se empieza", y nosotros no somos la excepción, querida Rosa, empezamos desde abajo para aprender a subir por el camino de la experiencia :)

¡Gracias, amorosa!

Besotes.

Liliana G. dijo...

Lo sé Patricia, y te lo agradezco de todo corazón, releer un texto es hacerle el mejor homenaje a un autor.

¡Gracias!

Muchos besos.

Liliana G. dijo...

Son muchas las veces que los seres humanos compartimos preguntas retóricas (valga la redundancia) y lo hacemos desde esa misma condición que nos hermana en la vida.

Muchísimas gracias, querido Marcos.

Todo mi cariño.

Liliana G. dijo...

¡Hola, Artadi! ¡Qué gusto me da encontrarte! Y más aún de la mano de una reflexión tan hermosa como la que me has traído.

Gracias, de todo corazón.

Besos.

Carmen dijo...

Hola Liliana. He llegado a tu blog desde el Mensajero Blog y me he encontrado con, entre otras, esta historia de reflexión íntima sobre el propio ser... y me ha gustado. me ha gustado la historia, me ha gustado tu manera de contarla, me ha gustado su esencia. Volveré a seguir leyendo en tu blog con más calma; estoy segura de que encontraré otras historias que me gustarán también.

Y casi se me olvidaba ya: he dejado nuevas noticias sobre André en el Mensajero Blog:

http://mensajeroblog.blogspot.com/

Subiré tu blog a la lista para tenerlo más a mano.

¡Biquiños!

Carmen

Carmen dijo...

Por cierto, tu blog tiene muchas cosas en común con el mío
(http://meiganoitedelua.blogspot.com/)

quizá sea por eso que me ha llamado tanto la atención...

ZEDIECK dijo...

La metamorfosis es necesaria aunque duela, el resutltado bien vale la pena. Excelente prosa, Liliana, bellísima.

Un beso.

MAJECARMU dijo...

Liliana,la mente crea monstruos y nos mete en verdaderos laberintos de dudas,desconfianzas,prejuicios y vagatelas inciertas,que nos prueban siempre...Creo que el corazón tiene siempre la última palabra,él nos salva siempre al borde del precipicio con la luz del sentimiento...he ahí el presagio de esa mariposa,amiga.
Mi felicitación y mi abrazo inmenso siempre,amiga.
FELIZ DOMINGO,Liliana.
M.Jesús

Liliana G. dijo...

Muchísimas gracias, Carmen, por tu calidez y ternura. Bienvenida a Cuentos, espero que sea como tu casa, donde la puerta siempre estará abierta para recibirte con cariño :)

Ya he pasado a leer las nuevas noticias sobre André.

¡Gracias!

Un beso grande.

Liliana G. dijo...

También pasé por tu blog, desde luego, y... ¡tenés razón! :)

Más cariños, Carmen.

Liliana G. dijo...

Es verdad, ZEDIECK, los cambios duelen porque dejan en el camino heridas y recuerdos, pero también nos dan la satisfacción de avanzar en la vida y hacernos cargo de ella.

Muchas gracias, querido amigo.
Besotes.

Liliana G. dijo...

Claro que sí, María Jesús, los laberintos de la vida nos asustan porque se abren a lo desconocido, pero una vez que alcanzamos la experiencia que ellos nos dan, todo fluye hacia la luz de los sentimientos.

¡Muchas gracias, mi querida amiga! Siempre es un placer recorrer tus bellísimas palabras.

Un beso gigante.

Campanilla dijo...

Liliana, tus pensamientos, que plasmas en el papel, son verdadera obra de arte. Prosa hermosa y que da para mucho hablar sobre el tema. En todo caso, tu tienes alas y ya vuelas muy alto. Besitos.

Kiki Nikon dijo...

Bello y enriquecedor texto, Lili, desde lo existencial se prolonga hacia la abstracción y de allí se lanza hacia las alturas.
Tiene mucha poesía, o mejor dicho, es poesía.

Besos.

chus dijo...

UNA FRASE MI ES, AYER PASO Y MAÑANA ES INCIERTO, ASI QUE VIVAMOS HOY OJO NI SI QUIERA EL LUEGO PIESA VIVE AHORA UN ABRAZO

Boris Estebitan dijo...

Hola, felicitaciones por tu gran blog, ha sido un enorme gusto leer tu blog. Te invito de manera cordial a que visites el Blog de Boris Estebitan y leas uno de mis escritos titulado “La Balada de Dracula”, espero que tu también te diviertas leyéndome, saludos cordiales.

Ramon Bonachi dijo...

Es una maravilla pasar por tu rinconcito y disfrutar de tus letras , gracias por ello . un fuerte abrazo

Liliana G. dijo...

No sé si tendré alas, Campanilla, pero lo que sí sé es que vuelo con la imaginación :)

Muchísimas gracias.

Besotes, amorosa.

Liliana G. dijo...

Es difícil que esconda mi formación poética, Kiki, aunque escriba prosa, siempre buscaré un lugarcito para darle un toque de poesía...

¡Gracias, amiga!

Besos.

Liliana G. dijo...

Hola, Chus, bienvenida a Cuentos.

Es cierto, hay que vivir el aquí y el ahora, lo único que nos gratifica o nos duele con certeza, pero pensar no evita que vivamos :)

Gracias por estar aquí.

Otro gran abrazo.

Liliana G. dijo...

Hola Boris, gracias por tu visita y por tus palabras, pasaré por tu blog, no lo dudes, ya te dejaré mi huella en él.

Bienvenido a Cuentos.

Un abrazo.

Liliana G. dijo...

Muchas gracias, a vos, querido Ramón, es un gusto encontrarte leyendo mis cuentos.

Un beso grande.

Humberto Dib dijo...

Qué buen texto, Liliana, me gustan mucho tus soliloquios... pero algo me llamó la atención: Me busqué en los seguidores y no estaba, no sé por qué, tal vez porque lo sea de otro de tus blogs.
Sea como fuere, ya está reparado el error.
Un beso enorme.
HD

La Turca y sus viajes dijo...

Hola!!!
Hoy solo vengo a recordarte que el día 3 se termina el concurso y tenes 20 votos para usar, jijiji
Buena semana con un abrazo de oso.

Linus dijo...

Claro que eres una mariposa, tu metamorfosis está completa y tus colores son los colores de la vida que depositas con tanto énfasis en tus textos. ¡Enhorabuena, niña!

Besos.

Liliana G. dijo...

¡Hola, Humberto! Gracias por tus elogios, de verdad. En cuanto a que no estabas entre los seguidores de Cuentos, no te hagas problemas, estás desde hace rato en Bitácora. Suele pasar que estamos convencidos de algo y la pifiamos :)

Gracias, una vez más.

Besotes.

Liliana G. dijo...

¡Gracias, Común! Ya "hice los deberes", ahora sólo resta esperar :)

¡Suerte y éxitos!

Un beso grande.

Liliana G. dijo...

¡Muchas gracias, Linus! Consideraré tu comentario como un gran piropo ¿acaso no lo es?

¡Gracias, de todo corazón!

Besos y cariños.

Juan Sin Nombre dijo...

De la ignorancia que creemos tener, nace la sabiduría que en realidad tenemos. Eso es lo que trasmite esta genial prosa poética.

Te superás, Lilita, y lo hacés con la humildad de los grandes. Felicitaciones.

Besos

Alejo Z. dijo...

De una belleza terrible el texto. Un poema en prosa que se cuela con delicadeza por la retina y hace del imaginario una hermosa mariposa. Perfecto Liliana!

Liliana G. dijo...

Excelente reflexión, Juan, la comparto, además de agradecerte de todo corazón un elogio tan logrado.

Un beso grande.

Liliana G. dijo...

¡Gracias, Alejo! Es reconfortante saber que este texto te llegó de una forma tan cercana.

Besotes.

Juan Romero dijo...

Es fantástico.

Me alegra mucho haber llegado hasta aquí.

Saludos.

Liliana G. dijo...

¡Hola, Juan! Bienvenido a Cuentos. Yo también me alegro de que hayas llegado hasta este puerto :)

¡Gracias!

Un abrazo.

Liliana G. dijo...

¡Hola, Manuel! Bienvenido a Cuentos :)

Muchísimas gracias por tu amabilidad y buenos deseos, si de algo me sirvió participar en la Blogoteca, fue para tener el honor de conocer gente maravillosa entre los que te cuento.

¡Felicitaciones por tu merecidísimo primer puesto en tu categoría! Pensé que nunca podría encontrar a quien votar, pero tu blog me pareció estupendo.

Un fuerte abrazo.

Rayén dijo...

Hay que ser oruga para luego ser mariposa y alzar el vuelo por una vida de colores.
La vida tiene muchos matices y muchos caminos.
Bella reflexión.
Abracitos, amiga.

Liliana G. dijo...

Así es, Rayén, debemos ser humildes para elevarnos hacia nuestras propias alturas, las de la vida.

Muchas gracias, querida amiga.

Besotes.

Elda dijo...

Que maravilla Liliana, ¡cómo escribes!, da gusto pasar los ojos por tan bella reflexión. Ignorante dices?... ignorante me siento yo cuando he leído tu forma.
Un placer inmenso volver por aquí.
Un abrazo.

Liliana G. dijo...

Al contrario, Elda, si has leído, has estado aprendiendo, y quien aprende, nunca es ignorante :)

Muchísimas gracias por tu reconocimiento, es una caricia para el alma.

Otro gran abrazo.