jueves, 28 de abril de 2011

DESENFRENO

¿Por qué me mira así? No me lo diga, déjeme adivinarlo. Le deslumbra mi desnudez sin escrúpulos en la entrega absoluta de mi ser; el color arrebolado que me adorna, en el falso pudor que ofrezco sin reparos; mi tacto, caliente como un volcán en erupción de pasiones desatadas; mi aroma, que lo hace paladear, obsceno, con sólo pensarme cerca… Y además, mi sabor ¡ah, mi sabor! Es cuando me atrapa con sus labios lujuriosos y su lengua me recorre por completo, cuando doy de mí, el néctar más exquisito. ¿O alguna vez probó un bistec más apetitoso que el mío?

45 comentarios:

Mar dijo...

Jajajajaja... Eres un volcán en erupción, sí... Jajaja.

El final, de "escándalo".

Un millón de besos, bistec apetitoso.

PD. Me has hecho reír, con ganas. Eres única, Lili.

MAJECARMU dijo...

Un buen bistec puede provocar cierto "desenfreno"no hay duda de ello,sobre todo cuando el apetito ha subido gradualmente y desequilibra las buenas maneras...!
Mi felicitación por tu dobleintencionado relato con notas de fino y buen humor sensual y erótico.
Mi abrazo inmenso siempre,maestra.
M.Jesús

Mary dijo...

Liliiiiiiiiiiiii mammamia,¿donde puedo comprar esos filetes?,jajajaj es buenisimo,muy sugerente y una vedadera trampa,creo que este finde tengo que celebrar algo con una suculenta cena jajajajja,muy bueno Lili,genial como siempre.

CHUIC¡!

Kiki Nikon dijo...

Es verdad, palpitarse un buen churrasco de esa manera es un desenfreno, pero maravilloso :0)
Qué final sorprendente!!!

Buenísimoooooo!!

Sos una caja de sorpresas, Lili. Besos.

Liliana G. dijo...

Me encanta que te haya hecho reír, me encanta... la literatura también puede ser divertida, cuando puedo juego con ella y la paso genial :))

Mil gracias, Mar, y una tonelada de besos.

Liliana G. dijo...

Es verdad, María Jesús, hay personas que son verdaderamente desenfrenadas con la comida, la que se erige en su máxima aspiración en la vida. Un poco de humor para acercarnos a ellas siempre es bienvenido.

Muchas gracias, querida amiga.

Un enorme abrazo.

Liliana G. dijo...

Un final tramposo pero con buena intención, Marita, justamente para arrancar una sonrisa. ¡Menudo chasco, eh! :))

Gracias, reina (y ojo con la cena de este finde, jajajaja)

Besotes.

Liliana G. dijo...

Al final con eso de un buen churrasco ya se me hace agua la boca, mmmmmmmmm Sí, definitivamente lo de "desenfreno" va de maravillas para la comida.

Muchas gracias, Kiki.

Besos.

Charly T. dijo...

Este micro me causó mucha gracia, Lili. Comienza generando expectativas que al final les pone la tapa al lector. Me sorprendió gratamente (y eso que conozco bastante tu maravilloso humor).

Un beso. Que tengas un gran fin de semana.

esteban lob dijo...

Y el bistec ¿viene con Palta?.
Para mi paladar sería lo máximo. Jajajajaja.


Un beso.

PATSY dijo...

¡Me agarraste desprevenida con ese final! Yo esperaba cualquier otra cosa de ese desenfreno, jajajajaja

Lili, no importa qué cantidad de años hace que leo tus textos, seguís sorprendiéndome día a día.

Un beso amigaza.

Liliana G. dijo...

Ese es el truco, Charly, justamente que el final cause sorpresa, y si además arranca una sonrisa, está todo dicho :)

Muchas gracias.

Un beso pasado por agua.

Liliana G. dijo...

Con palta... ¡Qué rico! No, si al final me va a dar antojo de comer, jajajaja

Gracias, Esteban.

Besotes.

Liliana G. dijo...

No sabés lo que me divierte que hayas caído en mi pequeña e inocente trampa...
Además, no importa cuántos años hace que nos conocemos, si no evolucionara mínimamente escribiendo, tendría que dejar de hacerlo :)

¡Gracias, Patri!

Besotes

P.D.: ¿Llueve por tu casa? Jajajaja

apm dijo...

ja,ja,ja,ja, así que todo era por un bistec... !menudo sería para provocar todas esas pasiones... qué bistec Lili, madre mía!
Ha estado genial el relato y con un final absolutamente sorprendente y supersimpático: me ha encantao.

Mil besotes bien gordotes

apm dijo...

Yo otra vez Lili, es que he visto que has puesto en el blog una foto en homenaje a Sábato que hoy nos dejó... ya sé que no veía y que no podía escribir ni leer, que era mayor (a punto de cumplir cien años), pero, era un excelente escritor y las veces que le ví en la televisión, me pareció un hombre afable y encantador, tierno y algo tímido... un gran maestro, como bien has puesto tú al pie de su foto. Un gran maestro

Mil besotes gordotes

Liliana G. dijo...

Hay personas que se apasionan más por un bistec que por otra persona, jajajaja
En verdad te digo apm que me divierte escribir con trampillas, y más aún sabiendo que arrancará una sonrisa :)

Gracias, amorosa.

Besotes.

Liliana G. dijo...

Es verdad, apm, con cien años no podíamos pretender que siguiera entre nosotros, aunque sí lo hará a través de su obra.
Y cuando digo obra no me refiero solamente a la literaria, pues don Ernesto, además de un excelente escritor, fue Doctor en Física y Becado en Europa y Estados Unidos para hacer investigaciones científicas, dio clases en las Universidades argentinas y, luego, al sentir el vacío que le producían las ciencias, comenzó a pintar y a escribir.
Por otro lado fue presidente de la Comisión que acusó a los militares de la dictadura militar por crímenes de lesa Humanidad.

Sí, apm, Sábato fue un excelentísimo escritor y gran persona. Gracias mil por tus palabras.

Un beso enorme.

Marcos dijo...

Y hay que adivinarlo nomás, jajajaja
El resultado es un excelente y simpático relato. Sos maravillosa con la pluma, Li.

¡Feliz Día del Trabajador, una vez más!

Con todo mi cariño.

El alegre "opinador" dijo...

... Y si se acompaña de buen vino, mejor que mejor.
Besos.

ZEDIECK dijo...

Y si es a la parrilla mejor todavía, creo que el desenfreno me ganaría con un buen asado.
Buenísimo.
Un abrazo.

Liliana G. dijo...

Gracias, Marcos, eso demuestra que la literatura también puede ser divertida ;)

¡Gracias!

Besotes

Liliana G. dijo...

Anuar Bolaños, bienvenido, buen poema. Gracias.

Un cariño.

Liliana G. dijo...

Y que sea tinto, Opi, para mi gusto... dulce :)

Muchas gracias.

Besotes.

Liliana G. dijo...

Ya tenemos una gran comilona, ZEDIECK, un suculento asado con vino tinto. Qué hambre me ha entrado...

Gracias.

Un cariño grande.

Linus dijo...

Me has atrapado, niña, eres una araña tejiendo historias, pequeñas historias que maravillan por su simpleza y su carisma.
Me quedo con este bistec.

Muchos besos para ti, y bien merecidos.

Carmen Conde Sedemiuqse dijo...

jajaja Seguro que no probo manjar mejor!!!

Besos y amor
je

Liliana G. dijo...

Ese es el cometido de alguien que aspira a ser escritor: urdir la telaraña de los sueños con la tela de sus letras.

Muchas gracias, Linus.

Un beso.

Liliana G. dijo...

Dicen que hay algunas personas que piensan con el estómago, Carmen...
Qué pena que no hayan conocido otros placeres ;)


Gracias, amorosa.

Muchos besos.

Marymar dijo...

Buenísimo, Liliana, entré por el lazo como la mayoría de los lectores, esperaba otra cosa menos alimenticia jajajaja

Gracias por este instante de sonrisas y sano relax.

Besos.

Liliana G. dijo...

Tu sonrisa es mi mejor premio, Marymar. Gracias a vos por tu humor y tu cariño.

Besos, amiga.

ALEX dijo...

Precioso poema. Llega a el alma...y toca el corazón.

Besos.

Te invito a ni nuevo espacio:

www.curiosahuelva.blogspot.com

**Andrea** dijo...

Jajajajaja Estupendo micro, Lili, necesitaba un poco de relax después de un aciago día de trabajo y encontrarme con tu cuento me vino genial. Maravilloso humor el tuyo.

Besos. Buen finde.

Liliana G. dijo...

Gracias, Alex, aunque creo que en este caso, el cuento "toca el estómago" :)

Pasaré por tu nuevo blog.

Besos.

Liliana G. dijo...

Mil gracias Andrea, tu risa y tu relax son mi mejor recompensa :))

Un beso grande y excelente fin de semana.

Daro dijo...

Jajajj No le encontraba razón a tanta arrogancia!

Muy bueno Liliana G., muy divertido!

//elojodelhuracan// dijo...

Una trampa exquisita (literalmente) para el lector desprevenido, entre ellos... yo ¡Estupendo!

Besos, que tengas un excelente domingo, Lili.

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludos afectuosos, mi apreciada Liliana:
Envolvente, impactante y muy sobrecogedor el microrelato que esta vez nos ofreces, querida amiga; en cuanto a mí se refiere, al final, me sentí tan envuelto, impactado y sobrecogido que hasta me creí antropófago; o sea, mi ego animal me hizo retornar a la oscura época de la caverna, jajajajajajaja... ciertamente: humano soy, hermana Lili. Me encantó este relato.
Recibe, enviado con inmensos cariños, mis mejores besos y abrazos.

Liliana G. dijo...

Justamente ahí está la trampa, Daro, para que te creas una cosa cuando es otra, jajajaja

¡Gracias!

Un beso.

Liliana G. dijo...

Jorge, en eso de "exquisita" estoy muy de acuerdo, y se ve que el comensal opinaba lo mismo a juzgar por cómo miraba a su objeto de deseo :))

Muchas gracias.

Besotes.

Liliana G. dijo...

Querido Rodolfo, si de apetitos se trata, todos somos igualmente de humanos. El caso es arrancar una sonrisa y disfrutar de ello ¿verdad?

Muchísimas gracias, querido hermano.

Un beso enorme, con todo cariño.

Juan Sin Nombre dijo...

Yo podría estar tan desenfrenado como el personaje de tu cuento.
Excelente como siempre, y cuando hay humor, doblemente excelente.

Un beso.

Liliana G. dijo...

Aquí había un comentario de Juan Sin Nombre, que se ha borrado cuando Blogger realizó el manteniento de este sitio durante los dos días que me impidió entrar.

De modo que te contesto igual, Juan, muchísimas gracias. Siempre es un placer recibir tus palabras :)

Besos.

Juan Sin Nombre dijo...

Y aquí estoy nuevamente dejándote mi cariño y mi admiración por las maravillas que surgen de tu pluma.
Este cuento pone una cuota de sano humor que invita a la sonrisa franca. El sorpresivo final es muy "sabroso".

Besos Lili.

Liliana G. dijo...

Gracias por volver, Juan. Sí, Blogger comenzó a "devolverme" los comentarios que me había quitado. Pero todo tiene su lado bueno, así nos volvemos a encontrar :)

Besos y buen fin de semana.