sábado, 19 de febrero de 2011

LA CARTA

Sentado frente al monitor de la computadora, ensayó escribir una carta de amor. Las palabras pugnaban por trascender el frío plasma que les daba vida a través de un software sin sentimientos, simplemente porque el disco rígido era como un corazón de piedra, incapaz de crear una base de datos para prodigarle felicidad al hombre.
Lo intentó una, dos, tres veces… a la cuarta, se dio por vencido y apagó la máquina. Buscó papel y pluma, y recuperando su esencia, escribió la carta en un suspiro
.

Seleccionado mes de octubre 2010, "El Escritor Errante"

48 comentarios:

PATSY dijo...

El 4 de octubre de 2010, escribí el siguiente comentario sobre este cuento mientras estaba concursando:

"y recuperando su esencia", allí está la clave, la esencia pasa por los sentimientos, nada más alejado de la tecnología. Resulta maravillosa la forma en que el cuento cambia de ángulo en su corta extensión. Hay arte.

No me equivoqué, el arte se manifestó de la mejor manera, por algo lograste ser nombrada, junto a Salvador, como la mejor microrrelatista del concurso. Me alegro que lo traigas al blog, creo que estos cuentos deben seguir circulando.

Un beso grande, genia.

Mar dijo...

Es curioso que, al recuperar su esencia, plasmó cuanto quería.

Maravilloso microrrelato pero en el que no estoy muy de acuerdo con su contenido: La frialdad de un ordenador puede convertirse en el más cálido vehículo para trasladar los sentimientos más ardientes y tiernos.

¿O no te llegan, Lili, los mil besos y abrazos que con todo mi cariño te envío?... ;)

Muacksss.

Liliana G. dijo...

Ya sé lo entusiasta que sos con mis cuentos, Patricia, cosa que te agradezco infinitamente. Sí, recuerdo todos los comentarios, los tuyos y los de otros amigos, porque justamente esos comentarios son los que me impulsan cada día que me siento a escribir.

¡Gracias!

Besotes.

Liliana G. dijo...

Eso es cierto, Mar, pero si no le ponía el ingrediente del romanticismo barroco ¿cómo iba a triunfar este cuento? :)

En realidad, el mensaje es que la tecnología (en todos los órdenes), no puede suplantar a los sentimientos, todo lo demás es poesía...

Sííííííí ¡me llegan todos tus mimos, Mar! Claro que me llegan.

Muchos besos de "rebote" :)

Mary dijo...

Creo que lo importante es el sentimiento que expresamos cuando nos sale del corazón,el medio,la herramienta es lo de menos,pero tengo que confesar que soy una romántica sin remedio y donde este una bonita carta de puño y letra que se quite todo lo demás....Liliana estoy totalmente de acuerdo con Patsy,estos microrelatos tienen que circular.

Un besazo de puño y letra.

Linus dijo...

Ese romanticismo que te caracteriza y fluye en cada uno de tus textos, es el que le da verdadero sentimiento. ¿Y qué más romántico que una carta de amor de puño y letra?
Hermoso, como tú.

Besos.

Anónimo dijo...

Cuando escribo en el papel, leo y releo, borro, paso una raya...me siento yo. Escribir en el computador es igual, pero todo se resuelve a teclazos.

El Mar...Siempre el mar dijo...

Recuerdo que en cuando no tenia ordenador y escribia mis poemas y mis cartas con lapiz y papel y me parecia algo tan natural que cuando llegó la tecnica y vi la facilidad conque se podia escribir y sobre todo corregir...me pareció que habia descubierto una herramienta fantastica.entiendo que alguien pueda sentir que se escribe mejor y con mas esencia cuando lo hace con lapiz y papel.

Yo soy mas vago y la tecnica me gusta cuando ayuda.

Me gusta tu relato como siempre.


Mi mejor sonrisa para ti.

Jose Manuel Iglesias Riveiro dijo...

Tienes toda la razón, cuando escribo a alguien, cuando tengo que mandar una carta o nota particular, no comercial, lo hago siempre escribiendola con pluma, esta la utilizo continuamente, tengo cuatro hermosas plumas,escribo a mano y luego lo paso al pC.
Un abrazo.

Marymar dijo...

La tecnología es genial desde lo práctico, pero la esencia del hombre, esa de la que hablás en el cuento, sólo está dentro de él, no en un "software sin sentimientos".
¡Me encantó!

Besos y buen comienzo de semana.

MAJECARMU dijo...

Liliana,el microcuento nos aleja por un momento de la frialdad de la máquina para acercarnos al corazón del ser humano...
No siempre recuperamos la esencia frente a la pantalla,a veces necesitamos la sencillez del lápiz y el papel para hallar el alma...
Aunque, como dice Mar,hemos humanizado el ordenador y es fácil transmitir todo el cariño y la fuerza de la amistad.
Mi enhorabuena por ese micro y mi abrazo grande siempre,amiga.
M.Jesús

Liliana G. dijo...

Opino lo mismo, Marita, si nos faltara la computadora sería como si nos faltara parte de nosotros, es verdad, también es cierto que este medio puede transmitir sentimientos enormes, pero... ¿hay algo más hermoso que recibir una carta de puño y letra del ser amado? Noooooo :)

Gracias, amorosa.

Muchos besos. TKM

Liliana G. dijo...

¡Eso mismo, Linus! Estoy en total coincidencia.

¡Gracias por el piropo!

Besotes.

Liliana G. dijo...

Creo que justamente allí está la clave, Shiraz, en tus palabras: "me siento yo". Lo resumiste de maravillas, al ser uno mismo en ese momento, también da parte de sí al otro.

Muchas gracias.

Besos.

Liliana G. dijo...

Hola Paco. No se trata de cambiar la tecnología por los viejos métodos, sino lo que se siente hacerlo a mano, los sentimientos que se experimentan durante la escritura y los sentimientos de quien recibe esa escritura dedicada exclusivamente a ella, es decir, descubrir al otro en los rasgos de esa escritura, eso es lo maravilloso.

Gracias, querido amigo.

Un beso enorme.

Liliana G. dijo...

A me pasa lo mismo, iglesiasoviedo, además comparto esa pasión por las plumas, si alguien me conoce, seguro que si me tiene que regalar algo, me regala una pluma :)

Para mí tienen toda la magia que puede albergar un escritor.

Muchas gracias.

Cariños.

Liliana G. dijo...

Claro, Marymar, esa también es la esencia del relato :)

¡Gracias!

Besotes.

Liliana G. dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con vos y con Mar, María Jesús, es cierto que por este medio podemos comunicarnos maravillosamente, que podemos transmitir cariño, amistad, y hasta amor... ¿pero podremos transmitir entrega?

De todos modos, querida amiga, como ya te habrás dado cuenta, este relato llama a la reflexión sobre la supremacía de los sentimientos por sobre las máquinas, es una metáfora, una poesía, algo que no debemos perder.

Muchísimas gracias, de todo corazón.

Un beso inmenso, M. Jesús.

Rayén dijo...

Liliana:
Tienes un hermoso blog.
Pienso que cada uno tiene que ver la mejor manera de expresar sus sentimientos para mi, aún, es más romantica una carta escrita con pluma y tinta, en esquelas.

Tienes una nueva admiradora.Te sigo.

Muchos cariños!!

Charly T. dijo...

Te lo diré una vez más: este cuento tiene alma, la tuya. Siempre aposté a él y no me defraudó. Más allá de la realidad (tecnológica) la magia de escribir con pluma es impagable. Como dice Oviedo, yo también tengo esas plumas a las que venero.

Besos, amiga mía.

Liliana G. dijo...

¡Bienvenida Rayén! Es un gusto y un honor encontrarte en mi blog, aquí te espero toda vez que quieras.

¡Gracias!

Besotes :)

Liliana G. dijo...

De tanto hablar de plumas, ahora me han dado ganas de usar una (y hasta me sale en verso, qué horror :)

Como siempre digo, querido Charly, los relatos tienen alma solamente cuando son leídos con el alma.

¡Muchas gracias!

Besos y cariños.

//elojodelhuracan// dijo...

La tecnología está al servicio del ser humano, sí, eso se entiende, se acepta y se disfruta, pero... ningún tecnicismo contiene un corazón. Lo que inspira al hombre es la belleza que brota de lo natural, de los sueños y de la vida.
Hermosamente romántico, Lili.

Un beso grande.

Liliana G. dijo...

Esa es la verdadera esencia del cuento,Jorge, encontraste más allá de las palabras, el significado simple pero enorme en su contenido.

Gracias, querido amigo.

Besotes.

apm dijo...

Ay Lili, que bonito relato... ahora, eso de quedarse petrificaos ante el teclado del ordenador o la máquina de escribir en algunos escritores, y sin embargo fluirle las ideas y las palabras delante de unas cuartillas es que es real como la vida misma, yo lo he oído; de hecho, hay muchísimos escritores que escriben en papel y con pluma o bolígrafo, y la verdad, puedo entenderlo, porque tiene algo de magia eso de la cuartilla en blanco y tu escribiendo letra tras letra.
(aunque Lili, pienso yo que para una carta -imaginate que sea de amor-, mucho mejor escribila en papel y con pluma, más personal y romántica !donde va a parar!, salvo que se tratase de una carta comercial, en donde entonces, mejor el ordenador). Vamos, que a mí un novio me escribe una carta de amor a máquina y se la come, fíjate, es que se la come ja,ja,ja,

Mil besotes gordis

Rodolfo de Jesús Cuevas dijo...

Saludo, mi muy estimada Lili:
Así debe ser, o por lo menos así lo creo yo, el ente humno es un ser cargado de sentimientos y no una máquina llena de alambres y vinilos por todo lado... yo, y por lo menos yo, escribo primero a mano y sobre un papel cualquiera, tal y como construyo mis cuadros, y, luego de tener mi relato poema o escrito ya finalmente terminado, lo paso al ordenador... Muy ciertamente, me encantó este relato, me fascina leerte, querida Lili. Mis abrazos.

P.D.
Hermana, en cuanto al tiempo de visita a blogs se refiere, soy yo quien ha de excusarse, pues, cada día que transcurre, tengo menos tiempo, además de los muy odiosos cortes energéticos, mas lucho por mantener mi blog en el aire.
Recibe, hermana querida, mis mejores y más tiernos abrazos.

Mª Carmen dijo...

Hola amiga un gusto pasar por tu blog, la verdad que una carta al menos para mí que he escrito muchas hace ya años parece que es como más intima y personal y te hace sentirte más segura, claro que yo esto de la tecnología tampoco lo tengo muy logrado jeje.Besitos.

Kiki Nikon dijo...

Cuando el romanticismo se pone en acción, lo personal adquiere entidad propia, sin duda.
Hermoso micro, lleno de poesía. Me encantó el final.

Besos, Lili. Que tengas un lindo fin de semana.

Liliana G. dijo...

Sí, sí, totalmente de acuerdo, apm, las cartas de amor escritas en papel, se guardan, se atesoran en algún lugar especial, que tenga significado para uno mismo. En cambio las que están escritas en ordenador, se guardan junto con el resto de cartas comerciales, amistosas, tonteras, spam y todo eso... no me parece justo que el amor esté a la altura de un spam ¿verdad?

A mí me costó Dios y el diablo escribir mis poemas o mis cuentos en la pantalla, ahora, aunque lo hago, sigo escribiendo en papel ¿o cómo cuernos podría escribir algo mientras voy en autobús? :)

Mil gracias, dulce de leche, y otros tantos besazos.

Liliana G. dijo...

Querido Rodolfo, yo también escribo en papel y luego lo paso a la pantalla, por lo menos, las más de las veces. En otras oportunidades, en cambio, lo hago directamente en pantalla, aunque confieso de que no es lo mismo, el papel tiene "alma"...

En cuanto al tiempo, sí señor, estamos todos más o menos igual, el esfuerzo por no cerrar mis espacios se hace sentir. No sabía que por allí también deben lidiar con los cortes de luz. Paciencia, no hay mucho más que se pueda hacer.

Muchas gracias, Rodolfo, y un beso grande.

Liliana G. dijo...

Es cierto, María del Carmen, las cartas manuscritas de cada persona llevan su sello personal, algo que contiene los sentimientos y la intimidad de quien escribe, aunque la tecnología ya nos está quitando ese placer.

Gracias, amiga.

Un gran cariño.

Liliana G. dijo...

¿Qué es un escrito sin poesía? Por lo menos los míos, no serían nada :)

Muchas gracias, Kiki.

Besos, y feliz fin de semana.

**Andrea** dijo...

Quedo prendada de tu cuento, la esencia del hombre es la esencia de lo humano, algo que nunca se debe perder. Felicitaciones por esta selección que se la merecía.

Besos, Lili.

josef dijo...

Creo que muchos de nosotros, nos vamos olvidando de lo que era escribir a mano y eso no es bueno, nada bueno para nadie ni siquiera para la tecnología.
"Recuperemos la esencia."

Un relato que además de genial, da que pensar. Por eso es doblemene bueno.

Besos.

Rafael Humberto Lizarazo Goyeneche dijo...

Hola, Liliana:

Has dado en el clavo, nada tan bello como una carta escrita con nuestro propio puño y letra...En ella va la esencia del ser.

Gracias por visitarme.

Abrazos.

Juan Sin Nombre dijo...

Encantador, Lili. Volver a nuestra esencia, ser nosotros mismos y ofrecernos al otro solamente con los sentimientos, para eso, nada mejor que una carta escrita de puño y letra.
Repartís sensibilidad y lo demostrás en cada cada palabra de cada cuento o poema. ¡Gracias!

Antonio Misas dijo...

Maravillosa Metáfora Liliana. Aunque yo ya no sabría vivir sin un trasto de estos, que lo ordena, que lo guarda...

Muchos besos

julia rubiera dijo...

la verdad que vamos perdiendo la buena y grata costumbre de escribir las cartas a mano . un besin muy grande de esta asturiana.

Marcos dijo...

Mi mundo no sería ni mundo ni mío si no tuviera papel y lapicera. Es cierto que uso la computadora a diario, pero sé que si lo necesito, mis viejos adminículos siempre estarán al alcance de mi mano y de mis sentimientos.
Este cuento, además de hermoso, lo sentí muy cercano.

Besos

Uka. dijo...

Hola, curioseando aquí y allá,en esta fría y endurecida máquina tecleadora,he llegado a tus cuentos y me he quedao leyendo...
Volver a los orígenes de papel y pluma,bolígrafo o lo que sea...qué bonito lo de aquellas cartas,ahora olvidadas.
Un beso.

Liliana G. dijo...

Y nada más humano que descubrir la propia esencia...
Muchas gracias, Andrea.

Besotes.

Liliana G. dijo...

Es verdad, a mí me pasa eso, cuando debo escribir "a mano", me cuesta, la falta de práctica hace de la torpeza su triunfo. Eso es lo que tendríamos que evitar, no perder la habilidad primaria.

Muchas gracias, José.

Un beso grande.

Liliana G. dijo...

Hola Rafael, comparto tu punto de vista, escribir a mano tiene encanto, magia y sentimiento.

Es un gusto encontrarte aquí, y también pasar a visitarte.

Besos.

Liliana G. dijo...

Y este poquito que repartí, acertó a llegar a vos, Juan, supo que detrás de tus palabras había una persona grande para recibirla ;)

¡Gracias!

Un cariño.

Liliana G. dijo...

Lo admito, lo admito, Antonio... yo tampoco podría prescindir de este aparatejo, pero tampoco del lápiz y papel ¿cómo haría entonces para escribir mientras viajo en autobús, mientras camino por la calle, en una sala de espera...? :)

Muchas gracias, Antonio.

Más besos.

Liliana G. dijo...

Esa es la verdad, Ozna, a ver cuánto duramos tratando de escribir un cuento más o menos largo a mano... tachando, agregando texto entre líneas, etc.
¡Pero se puede!

Gracias amiga.

Un beso grande.

Liliana G. dijo...

Tu mundo y el mío son el mismo, misma época y mismos valores. Nacimos sin computadoras, aprendimos a escribir a mano, y eso no se perderá nunca.

Gracias, Marcos.

Besazos.

Liliana G. dijo...

Hola Uka, bienvenida :)
Sí, sin estos fríos artilugios no podríamos habernos cruzado nunca, es que cada cosa tiene sus pro y sus contras. Con este pro estoy encantada.

Gracias, aquí estaré cada vez que gustes.

Besos.