jueves, 16 de junio de 2011

UMBRALES

De improviso me convertí en un extraño dentro de mi propio cuerpo. Una sensación de levedad, nunca experimentada antes, embargaba mis sentidos hasta el punto de envolverme en un extraño misticismo, como si estuviera a punto de transgredir los ignotos umbrales de la vida, y por qué no, los que quizás hubiera más allá de ella.
Podía hurgar en mi interior, y siempre descubría una luz que me elevaba hasta transformarse en el ímpetu incontenible de mi embeleso.
¡Maravillosa metamorfosis! Así quiero quedarme para siempre, anclado al tacto de tu piel, bebiéndome de a poco tus besos de canela.
Post N° 100

miércoles, 1 de junio de 2011

RAÍCES

La noche, bajo las estrellas, se había convertido en nostalgias para el viejo. Tenía casi noventa años, o eso creía. Volvió en el tiempo recordando el antiguo aparato de televisión en blanco y negro, aquellos teléfonos con disco, inmensos, el bolígrafo “Bic”, y tantas otras cosas que se le habían quedado prendidas en la memoria.

Después vino la era de la tecnología y todo se revistió de computadoras, softwares, videos…. Pensó que nunca se adaptaría a ellas, y sin embargo, a sus cincuenta años vivió rodeado de máquinas que se le hicieron imprescindibles.

Y ahora…

¿Cómo sucedió todo? Se preguntó a sí mismo sin encontrar respuestas. Ahora la tecnología era su último recuerdo, pero estaba bien que así fuera. No quiso perder el concepto del pensamiento, entró lentamente a la cueva, y a la luz de un pequeño fuego dejó la impronta de sus manos sobre la pared de piedra.